En el emocionante mundo de las apuestas deportivas, uno de los términos que a menudo se escucha es «underdog«. Esta palabra, derivada del inglés, hace referencia a equipos o eventos que se consideran menos probables de ganar. Pero, ¿qué son exactamente estas apuestas y cómo es posible sacar provecho de ellas a la hora de hacer apuestas deportivas? Es algo que cada vez más jugadores quieren saber. ¡Y tiene su respuesta!
Definición y origen de las apuestas underdog
También conocidas como apuestas de «outsider» o «no favorito», se refieren a apostar por un competidor o equipo que, en comparación con su oponente considerado favorito, tiene probabilidades más bajas de ganar. Estas apuestas implican mayores riesgos, ya que las posibilidades de que gane son teóricamente menores.
Sin embargo, si logra una victoria, los apostadores que hayan respaldado a este competidor pueden recibir recompensas significativamente mayores en términos de ganancias. Por esta razón, suelen ser mecanismos muy utilizados en los pronósticos deportivos, como también sucede con el cashout.
Su origen se remonta a las primeras formas de apuestas, donde las personas veían oportunidades de apostar en eventos deportivos desequilibrados. A lo largo de los años, los apostadores han buscado identificar situaciones en las que podrían tener una oportunidad de sorprender y ganar.
Los factores que influyen a la hora de apostar
A la hora de realizar apuestas underdog, los jugadores consideran una serie de factores que influyen en su decisión:
- Historial y estadísticas. Analizar el historial y las estadísticas de los equipos o competidores puede proporcionar información sobre su rendimiento pasado. Y, a su vez, su capacidad para superar las expectativas.
- Lesiones y ausencias. Lesiones importantes o la ausencia de jugadores clave en un equipo pueden cambiar drásticamente las probabilidades y brindar oportunidades.
- Motivación y determinación. En ciertos casos, los equipos o competidores menos favorecidos pueden estar más motivados y determinados a superar las expectativas. Esto puede influir en el resultado.
- Condiciones del juego. Las condiciones climáticas, el tipo de campo y otros factores ambientales pueden nivelar el campo de juego. Por ende, favorecer estas apuestas.
Ejemplos claros de apuestas underdog
Aquí están algunos ejemplos notables:
- La Cenicienta en March Madness. En el torneo de baloncesto universitario de Estados Unidos, el March Madness, a menudo se producen sorpresas cuando equipos menos conocidos derrotan a equipos de alto rango. Estos casos son ejemplos de escenarios clásicos que favorecen apuestas de este tipo.
- Leicester City en la Premier League. En la temporada 2015-2016, el Leicester City, un equipo considerado como uno de los más pequeños en la historia de la Premier League, ganó el título de la liga. Sorprendió a todos y supuso enormes ganancias para quienes apostaron por su victoria.
La importancia de evaluar los riesgos y tomar decisiones informadas
Apostar de este modo puede ser emocionante y potencialmente rentable, pero también conlleva riesgos significativos. Es esencial que los apostadores evalúen cuidadosamente los factores que influyen en la probabilidad de victoria y tomen decisiones informadas. Al final del día, entender las apuestas underdog y cómo aprovecharlas puede agregar emoción en las apuestas deportivas. Es necesario recordar que siempre hay que apostar de manera responsable y disfrutar del juego. Solo así se podrán pasar grandes momentos y vivir al máximo cada jugada